Los vinos de Côtes de Provence extraen su fuerza de carácter de una tierra bañada por el sol, a los pies de la montaña Sainte-Victoire. A medio camino entre Aix-en-Provence y Saint-Maximin, el Château des Ferrages es una de las cuatro fortalezas que forjaron la historia de Pourcieux. Rodeado de parques arbolados, este edificio tradicional renacentista dominaba el pueblo. La mayor parte del edificio se ha perdido con el paso del tiempo y hoy sólo quedan la torre y algunos restos arquitectónicos. Sin embargo, su tesoro más valioso es, sin duda, la bodega que lleva su nombre. Sus 28 hectáreas de viñedos producen cuatro vinos base que se envejecen cuidadosamente en las bodegas del Château des Ferrages. Estas bodegas combinan técnicas modernas de vinificación y métodos tradicionales de envejecimiento.
Garnacha, Cinsault, Syrah. Es un rosado interesante. Es refrescante como debe ser, con una acidez vibrante. Tiene un paladar mineral y huele a fresas. Pero a medida que se abre aparece una nota salada que aporta un poco de profundidad a la fiesta. Es un rosado estupendo para disfrutar de una puesta de sol.