Queirón presenta su Ensayos Capitales Nº3, un monovarietal de tempranillo de altura en el que incorpora la ancestral técnica del asoleo de las uvas
El equipo enológico de la bodega Queirón no para, no se conforma. Reflexiona y busca. Sueña y materializa sus ideas navegando entre la innovación y la reinterpretación de la tradición. Lo de ahora y lo de siempre. En este contexto surge Ensayos Capitales Nº3, un monovarietal de tempranillo de altura de nuestra viña de La Pasada (en las cresterías de la Sierra de Yerga) mecido por los rayos del sol más allá de la vendimia. Un estilo nuevo de elaboración en Rioja que brota de la inspiración en la tradición queleña de la pasificación de sus ciruelas claudias que se asolean sobre cañizos. El asoleo es una práctica ancestral de sobremaduración de las uvas por exposición directa al sol de los racimos tendidos al aire libre que propicia una deshidratación parcial y en la que se mantiene la integridad de las bayas que evolucionan en su concentración sin sufrir podredumbres. En el Marco de Jerez, el asoleo se realiza históricamente exponiendo al sol los racimos cortados sobre esteras de diferentes formas y materiales, siendo lo más clásico el empleo de los redores o esterillas de esparto de forma circular.
«En Quel, el asoleo lo realizamos sobre cañizos antiguos que se emplean para pasificar las ciruelas, en el que los racimos los extendemos de forma muy cuidadosa tras la vendimia manual. Cada día les damos la vuelta para que la incidencia de los rayos de sol sobre los granos de uva sea lo más homogénea posible», subraya Rubén.