Envejecido en pequeños lotes durante dieciocho meses en barricas de roble blanco americano, el Tequila Don Julio® Añejo es un testimonio del arte de hacer un tequila añejo de sabor superior. Rico, distintivo y maravillosamente complejo, su sabor alcanza el equilibrio perfecto entre el agave, la madera y toques de vainilla. Se saborea mejor solo en una copa o simplemente con hielo.
Robusto y complejo, con expresiones de agave cocido, miel silvestre y caramelo infundido por el roble. Intensa, con ligero toque de especias, y la esencia de la miel silvestre.