Taittinger es una de las pocas “maisons” de champagne que lleva el nombre de la familia que la dirige. El rosado de Taittinger es una apuesta segura. Su color salmón y sus notas de fruta fresca, sin duda, seducirán tu paladar. Un verdadero rosado brut, fino y delicado.
Taittinger Prestige Rosé destaca inmediatamente por su intenso tono brillante cuyo secreto reside en el hecho de que es un coupage, cuya elaboración es más compleja y costosa. Una cantidad de vino tinto tranquilo (15%) producido a partir de los mejores Pinot Noirs de Montagne de Reims y Les Riceys, se agrega a la mezcla final, para dar a esta cuvée su inconfundible color e intensidad vibrante en el paladar. La elevada proporción de Chardonnay (30%) que completa el ensamblaje aporta la elegancia y delicadeza que caracterizan el estilo de Taittinger.
Su cuerpo intenso y brillante es de color rosa vivo. Las burbujas son finas y la espuma persistente. La nariz, muy expresiva, es a la vez fresca y joven. Desprende Aromas de frutos rojos (frambuesa silvestre recién triturada, cereza, grosella negra). En boca, este vino presenta un buen equilibrio entre una textura aterciopelada y un sabor con cuerpo. Los sabores recuerdan a frutas rojas frescas y crujientes. El paladar en cuatro palabras: vivo, afrutado, fresco y elegante, como sólo un rosado puede serlo Taittinger Prestige Rosé puede disfrutarse tanto al principio como al final de la velada. Deliciosamente perfumado para un aperitivo, también es un sutil acompañante de postres de frutas, como tartas, ensaladas y crumbles.
